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COPPALJ

"Conseguimos liberar el babaçu aquí, en nuestro territorio. Nuestra vida está hecha de batallas, trabajo duro y luchas. Para poder hacer frente a todo, al coste de la vida, a la sostenibilidad, a la ignorancia y a la incomprensión. Esta lucha en defensa de la palmera babaçu, nuestra madre, es muy importante"

Diocina Lopes do Reis – Miembro de COPPALJ

COPPALJ

Ubicación: Lago do Junco, Maranhão

Año de creación: 1989

Número de miembros: 201

Sector: Cooperativa de agricultura familiar

Temas clave: Empoderamiento de las mujeres, desarrollo comunitario, protección del medio ambiente

  • 1 No Poverty
  • 5 Gender Equality
  • 13 Climate action
  • 15 Life on land

Historia de la cooperativa

COPPALJ (Cooperativa de pequeños productores agroextrativistas del Lago do Junco y del Lago dos Rodrigues) es una cooperativa de agricultura familiar situada en el municipio de Lago do Junco, en el Estado de Maranhão, uno de los más pobres de Brasil. La cooperativa fue fundada en 1989 por pequeños agricultores y mujeres rompedoras de nueces de babaçu, que son trabajadores rurales dedicados a la recogida y rotura de nueces para producir aceite de babaçu. Antes de crear la cooperativa, la mayoría de las familias estaban involucradas en la lucha contra los terratenientes que ponían en peligro su continuidad en la tierra en la que estaban acostumbrados a vivir y trabajar. Una vez que consiguieron mantener el control sobre sus tierras, comenzaron su lucha para proteger las palmeras de babaçu. Consiguieron aprobar una ley municipal que amplía su control sobre las palmas de babaçu y les garantiza el libre acceso a este recurso natural que los terratenientes querían destruir para sustituirlo por la cría de ganado. Además, se creó una cooperativa para revalorizar el babaçu y comercializarlo. Hoy, la COPPALJ cuenta con 201 miembros. Transforma las nueces de babaçu en aceite ecológico, que se vende en los mercados locales, nacionales e internacionales. La COPPALJ también ha creado una red de 8 tiendas a nivel comunitario, donde los miembros pueden vender sus nueces y comprar diversos artículos para el consumo. Se trata de una cooperativa mixta, en la que pueden ser miembros tanto mujeres como hombres. Tal y como informaron las mujeres miembros, ha sido necesario mucho trabajo y formación para que las mujeres participen activamente en la gestión de la cooperativa y para que los hombres acepten el liderazgo de las mujeres, y aún queda mucho camino por recorrer. La cooperativa también forma parte de una red de organizaciones del movimiento social, como ONG locales, como ASSEMA y AMTR, sindicatos y escuelas de agricultura familiar. Desde la creación de la cooperativa, la calidad de vida de los miembros y de sus comunidades ha mejorado sustancialmente en muchos ámbitos, desde la nutrición a la educación y desde el acceso a la atención sanitaria a una vivienda digna. Sobre todo, según informaron, al actuar juntos se han empoderado y han encontrado su propio camino hacia la libertad y la justicia social.

Puntos clave

  • Un proceso endógeno de acción colectiva puede dar lugar a cooperativas capaces de empoderar a sus miembros, transformar territorios y generar modelos innovadores de desarrollo local.
  • Las cooperativas de agricultura familiar tienen un papel fundamental en la mejora del bienestar y la seguridad alimentaria de las comunidades rurales. 
  • Las cooperativas mixtas, si cuentan con el apoyo de la formación en materia de igualdad de género y de otras organizaciones, pueden ser un medio para el empoderamiento de las mujeres y para conseguir lugares de trabajo más inclusivos.
  • Para convertirse en motor del desarrollo local sostenible, es fundamental que las cooperativas formen parte de una red compuesta por otras cooperativas, así como por asociaciones, sindicatos y otros organismos de la economía social. También deben contar con una estrategia de acción colectiva para proteger el medio ambiente y hacer campaña por las políticas públicas.